
Por qué es mejor no vender tu casa a los vecinos
Su vecino vive tres calles más allá y hace diez años pagó 300 000 euros por una propiedad similar a la suya. Ahora quiere comprar su casa por el mismo precio como inversión. Quizás dentro de unos años sus hijos puedan mudarse allí. A primera vista, parece un gran negocio. Precisamente los propietarios que llevan mucho tiempo viviendo en su inmueble y que quizá lo pagaron en marcos alemanes, a menudo desconocen el valor actual de su propiedad.
Además, no tienen en cuenta que incluso pequeñas diferencias en la ubicación y en el propio inmueble pueden dar lugar a diferencias de valor. Mientras que su inmueble se encuentra en una calle lateral tranquila, su vecino vive en una calle con mucho tráfico y tampoco tiene calefacción por suelo radiante en su inmueble. A esto hay que añadir la inflación y el aumento de los precios inmobiliarios. Lo más probable es que el inmueble de su vecino también valga más ahora.
La mayoría de los propietarios se dan cuenta de que vender a un vecino es complicado cuando empiezan a llegar varias ofertas. A nadie le gusta negociar con amigos y conocidos y rechazar al vecino A porque el vecino B ha hecho una oferta mejor. Quien encarga la venta a un profesional, delega esta responsabilidad y se asegura unas condiciones justas.
A esto se añade que un acuerdo verbal entre vecinos siempre conlleva riesgos cuando se trata de grandes sumas de dinero. Si de repente aparecen defectos que no ha comunicado a su vecino, este puede hacerle responsable. Lo mismo ocurre si faltan documentos importantes, como el certificado de eficiencia energética. El simpático vecino puede convertirse rápidamente en un demandante insistente.
Si contrata a un profesional, minimizará este tipo de riesgos legales. Un agente inmobiliario profesional realiza una valoración profesional, se encarga de todos los documentos relevantes para la venta y se asegura de que usted cumpla con todas sus obligaciones al firmar el contrato de compraventa.
Además, un agente inmobiliario puede conseguirle ofertas mucho mejores para su inmueble. Al fin y al cabo, él sabe exactamente lo que puede pedir por él, a diferencia del vecino, que solo hace estimaciones y, naturalmente, ante todo vela por sus propios intereses.
Por supuesto, el hecho de contratar a un profesional no significa que al final no pueda vender a su vecino, aunque no sea él quien haga la oferta más alta. Simplemente ha contratado a un experto que negociará el mejor acuerdo para ambas partes. De este modo, la venta de inmuebles se desarrolla de forma relajada para todas las partes.
¿Quiere saber si su inmueble vale más de lo que le ofrece su vecino? Póngase en contacto con nosotros ahora. Estaremos encantados de ayudarle con la venta.
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